Existen tres tipos de testamentos cuyas características principales exponemos a continuación:
Testamento abierto
El conocido como testamento abierto, significa que los herederos pueden conocer el contenido del mismo con antelación pues está abierto. Para hacer este trámite hay que acudir al notario, quien conservará el documento debidamente protocolizado para su lectura por los interesados en cualquier momento.
Testamento cerrado
Al contrario que el anterior, existe también la posibilidad de que la voluntad del testador quede recogida en un sobre o pliego cerrado, cuyo contenido solo se sabrá tras el fallecimiento. En este caso los herederos pueden conocer los bienes de que dispone el testador ni el reparto de los mismos.
Testamento ológrafo
El Código Civil también permite que el testador escriba de su puño y letra sus últimas voluntades. Ello se conoce como testamento ológrafo. En esta modalidad no se recurre a notario y puede darse el caso de que se pierda. Además, el contenido puede incumplir requisitos legales que lo invaliden.
En todo caso, te recomendamos que acudas a un abogado antes de decidir qué tipo de testamento hacer. En Agote Abogados te ofreceremos asesoramiento personalizado y si lo deseas te ayudaremos a redactar un testamento que cumpla todos los requisitos legales.
